Ya lo he vivido otras veces

Estamos de enhorabuena: ¡vuelve el futbol champán!

Curiosamente los mismos que hace apenas una semana ajustaban la soga al cuello de Luís ahora nos vienen otra vez con el cansino cuento del tiqui-taca, inundándonos cada día con portadas y titulares en 3D sobre la ‘nueva’ e ‘ilusionante’ andadura de nuestra Selección.

Motivos para que corra la euforia no faltan la verdad, solo hay que ver que desde que el pasado sábado ‘La Roja’ prácticamente sellara su pase a la fase final de la Eurocopa todo ha sido un constante goteo de ‘buenas nuevas’. Miren sino el espeluznante titular que nos acercaba ayer la edición digital de Marca.

Poco se puede decir, no se veía algo así desde el Raúl y diez más.

Resulta que nuestro sabio chamán ha dado con la lista que nos llevará a conquistar el cetro europeo el próximo verano. Dios me libre de ir a contracorriente de las informaciones del diario Marca, pero esa base de la que habla no es muy distinta a la de aquel equipo que empató miserablemente en Islandia hace pocas semanas.

Y esto en el panfleto de Recoletos, porque en el As van mucho más allá, corren ríos de tinta, editoriales y articulos a dos páginas de los más sabios expertos alabando ese ‘fútbol de toque’ al más puro estilo de la Naranja Mecánica.

Por no hablar ya del famoso ‘Gol Perfecto’ el cual pasará a la historia como el mejor gol jamás visto a lo largo de las fases de grupos clasificatorios para una Eurocopa (nótese la acidez que desprenden las cursivas).

Atrás quedaron las sonrojantes derrotas contra Suecia e Irlanda del Norte que nos pusieron al borde de la eliminación, el debate de Estado sobre la no convocatoria de Raúl y las continuas espantadas de Aragonés.

El ‘Luisazo’ del sábado parece que ha hecho ‘piña’ entorno a la Selección. Vuelve el optimismo. Otra vez los más guapos, los reyes del mambo, el Brasil europeo.

A que ganamos la Eurocopa…

¿Les suena de algo?

Mañana el fútbol sustituirá a 'las crónicas sociales' de Gente en La Primera y el español medio volverá a sentarse frente al televisor equipado con su Cruzcampo reglamentaria y una bolsa de Chetos para ver un partido, esta vez amistoso, de ‘La Roja’ en Helsinki. Y posiblemente lo haga acompañado de los pajaritos que han ido llegando a su cabeza durante la semana.

Es fácil contagiarse con la mierda que vende la prensa, siempre remando a favor. Por lo general en este país se vive de humo e ilusión (sino que se lo pregunten a Calderón).
Y aunque esta vez es diferente a las demás, porque no es fácil ilusionar al personal con el jeto de El Sabio de Hortaleza, ni con sus idas y venidas al fútbol piedra, ni con esta agonía para entrar como segundos de un grupo más que asequible en la Eurocopa, la botella poco a poco se va llenando.

Por eso espero que mañana empatemos o ganemos por la mínima con un gol agónico de Marchena a una selección menor como la finlandesa y bajemos todos de esa nube en la que nos han querido subir.
Y si no mañana, de aquí a unas semanas contra Suecia o la débil Irlanda…

No quiero que el globo se hinche. Ya lo he vivido otras veces.

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