Así que no es mal momento para empezar a hacer una primera valoración-ranking o como se le quiera llamar de lo mejor y lo peor que hemos podido ver desde septiembre hasta la fecha, que no ha sido poco.
Entre la televisión patria, la americana e incluso en algunos casos la inglesa prácticamente no hemos dado a basto para digerir todo el material.

Vamos allá, empezaré por la parrilla americana que seguramente será la que tiene más tirón, no sin antes advertir de spoilers sobre temporadas en curso de las series que se comentarán o de posibles heridas que puedan provocar algunas de las opiniones que se vierten en el siguiente ensayo.

La oferta era amplia y evidentemente ha sido imposible seguir toda la programación. Ante todo soy un ser sociable, con trabajo, carrera, amigos...y necesito salir de casa aunque solo sea para comprar tabaco. Así que solo estoy en disposición de hablar de aquellos programas que he podido seguir.
Heroes, Prison Break, Dexter, House, Damages, Californication y Dirty Sexy Money fueron mis apuestas desde principio de temporada y sobre ellas debatiremos a continuación. Me ha sabido mal dejar otras en la recámara como Nip/Tuck, Weeds, How I met your mother, o Tell me you love de la que se ha hablado muy bien. No se puede tener todo en esta vida, ya les llegará su momento.

De entre las elegidas y si fuera necesario otorgar un trofeo honorífico como campeón de invierno este sería sin duda para nuestro preciso y silencioso Bay Harbour Butcher aka Dexter. La mejor serie, y además de lejos, en la parrilla otoñal americana.
Dexter es un caso peculiar, nunca segundas partes fueron tan buenas, esta vez incluso más que primeras! Dexter a diferencia de otras (recadito para Heroes) no contamina la red constantemente con noticias tomateras ni entrevistas cursis a sus actores. Tampoco necesita anunciar cliffhangers de infarto en infinitas promos al final de cada temporada para intentar mantener la expetación de cara al siguiente curso, pues todas las tramas suelen quedar totalmente cerradas al final de cada volumen, y para los que no hayan experimentado esa sensación...: no hay mayor cliffhanger que ese.
Parece mentira pero el hecho de obtener respuestas tan a medio-corto plazo provoca una sensación de plenitud extraña, a las pocas horas de haber visto la season finale y aun sin acabar de asimilar los acontecimientos, en caliente uno piensa:
- Coño, y ahora que? No puede ser que esta serie tan cojonuda se haya ido para siempre? Pero...si no hay más argumento... Ya sé todo lo que tenia que saber, ¿Qué más me van a explicar?
Esa intriga de no saber que pasará con la serie el año que viene, esa emoción de descubrir una serie igual pero distinta en cada temporada es mejor que cualquier cliffhanger convencional que nos pudieran presentar.
Y si a esto le sumamos el suspense, la brevedad (12 capítulos), que siempre va bien para evitar rodeos innecesarios, las grandes (finalmente reconocidas) interpretaciones como la de Michael C. Hall , y sobretodo el buen gusto y la elegancia nos puede quedar un producto como este: camino del gore como critican los puristas, pero en el que apenas nos venden sangre grauitamente.
Por cierto, para el que todavia no lo sepa Dexter cuenta la historia de un elegante Serial Killer camuflado bajo la apariencia de un CSI Miami, ojo! que no se me confunda nadie, aquí no hay Horatios, ni Hummers ni horteradas del estilo, esto es solo el contexto donde se desarrolla la trama, el terreno de juego. A partir de ahí el resto es mejor que lo descubráis vosotros mismos. Son dos temporadas tan cortas como tensas, apenas 12 capítulos cada una, pero que valen por veinte, merece la pena. La intro sola ya vale más que diez capítulos de La familia mata.

De ser yo el juez Californication se llevaría la plata. La nueva serie de David Duchovny ha sido una de las pocas gratas sorpresas de esta temporada. Ya tuvo su momento de gloria en este blog pero como siempre: la cabra tira al monte, y echando la vista atrás parece que solo me quedé con el tema 'tetas-mamadas' y de rebote con las salidas del políticamente incorrecto Hank Moody, que están muy bien, pero evidentemente Californication es más que eso, es más que cuatro escenas de cama y un buen guión, es ante todo una buena historia de amor.
Pero no amor pastel, como el de Michael y Sara, o como el de Eva y Marcos. Californication es amor inteligente, gracioso, digerible incluso para tipos tan duros como Dirty Harry, pero a la que no le falta el aroma romantico de las Ghost, Titanic o Love History, aunque como he dicho sin llegar a límites vomitivos.
Esto va para tí amigo macarrón de barrio, ya sé que ni llorastes cuando las letras chinas de tu antebrazo, pero hazme caso, deja los prejuicios a un lado y toma nota de estos doce capítulos atentamente, déjate llevar si quieres por las pechugas de los primeros capítulos y luego aprende, tu Fany pronto te lo agradecerá. Y para vosotras, pues no sé, aprended también a perdonar, o sino simplemente reiros y disfrutad del Duchovny este que al parecer os pone bastante.

Oro para Dexter, plata para Californication y bronce... ¿bronce para quién? Pues no sé, tengo mis dudas y varias candidatas en mente de entre las que nos faltan por hablar.
La cosa andaría entre Damages y House (sí, House, a mí aun me gusta el cabrón manipulador).
Y mira, sabes qué? que aunque sea un empate técnico me voy a decantar por el cojo, solo por llevar la contraria a aquellos que critican aludiendo ser el mismo cuento de siempre, que los nuevos personajes no den juego o que la serie haya saltado el tiburón, pero, y que hay de malo en lo de siempre?
Es posible que algun día nos llegue a cansar, todavia no. House habrá perdido el factor novedad, pero sigue siendo entretenida. Además eso de que los nuevos no aportan nada no es del todo cierto, el jueguecito que se ha inventado nuestro médico pastillero para seleccionar a sus nuevos discipulos ha dado vidilla, y no digais que ver a Foreman como jefe del que fuera su verdugo (?) no tiene su gracia?
Y como he dicho, al fin y al cabo el (mal)humor de House sigue siendo igual de bueno que siempre y eso es lo que cuenta.

Damages se queda sin premio desgraciadamente, puede que le haya perjudicado la lejanía con la que la veo ahora, pues fue una de aquellas que nos sirvió de aperitivo durante las primeras semanas post-vacacionales. Y estuvo bien la verdad, un thriller novedoso sobretodo por ese elemento temporal que tan bien sabe destacar Casciari en este artículo.
Es verdad que como se dice nadie habia sabido jugar tan bien con el 'desorden' y las medias verdades para hacer más que interesnte una historia que no pasaría de un sábado por la tarde en Antena 3, pero he de reconocer que a mí me llegó a saturar tanto giro, ahora 'pa lante' ahora 'pa atrás', ahora estos son los malos ahora no... Lo siento mucho pero tanta vuelta hace que al final se pierda un poco el factor sorpresa, aunque eso no quita que también se mantenga como aspirante y sea una de las recomendables.



Otra que se queda fuera del cajón: Prison Break, previsible noticia aunque con matices.
Prison Break es un producto agotado, una historia que ya no es historia, sus responsables no tienen perdón de Dios tras haber puesto la pasta por delante de un final digno... pero... me cago en la puta! sigue enganchando casi como el primer dia: es una droga!
Prison Break es como ese chicle que empiezas a masticar a media tarde, y pasadas más de tres horas llega la hora de cenar y te das cuenta que aun lo tienes en tu boca. Ya no tiene sabor, pero no puedes parar de jugar con él. Extraño razonamiento del cual se desprende que vicio no va ligado a calidad.
Y ahora viene la estopa: tiene mucho mérito que con tan poco y además haciéndolo tan mal, ofreciéndonos la muerte más forzada y cutre del último cuarto de siglo, ofreciéndonos tres meses casi infumables sin ningún argumento y con personajes que no son ni la bota de los Abruzzi, Kellerman, y compañía... sigamos embobaos delante del PC.
Es que no hay explicación alguna, todos sabemos que Scofield es el más listo de la clase, que podrá salir de cualquier apuro con los conocimientos que le ha dado su puta mierda de ingenieria (tomo nota). Ha taladrado muros, ha construido Taj Mahals con palillos, y en esta última temporada no sé que coño hizo con la medalla de McGrady que nos dejó a todos con la boca abierta. Una cosa no quita la otra, puede que siga teniendo grandes momentos de tensión pero... hay algo que pinta mal.
Parecen argumentos contradictorios a los que me han hecho darle el bronce hace cinco minutos a House... y no es que me cansen las aventuras de Michael en Panamá, simplemente es que quiero un final digno para algo que un día fue tan bueno

Me llamó la atención por el nombre que me sugeria una mezcla entre peli porno y algo tipo Miami Vice. Evidentemente no tiene nada que ver ni con lo uno ni con lo otro. Dirty Sexy Money es una especie de parodia-culebrón de la típica familia multimillonaria tipo que sé yo, los del Principado por ejemplo, un hijo es algo así como Alberto, otra es más bien Estefanía, incluso han metido prototipos rollo Paris Hilton, o Pete Dorety,.... Hay dias en los que está entretenidilla, te ries y tal, pero no me convence. Hace tiempo que me decidí por la In touch y dejaron de circular bits de los Darling a través de mi router. Prefiero el mundo real.

Y por último la gran decepción, medalla de cartón, cactus, farolillo rojo y corona de espinas para: Heroes. Y eso que no hace mucho recupere mi fe en ellos pero... no nos engañemos, el flamante Volumen 2 ha sido una puta mierda. De once capitulos se salvan un par o tres, uno de ellos muy bueno sí, pero no deja de ser un balance pobre para el potencial que se le supone.
La mitad de los personajes o no tienen nada que decir o no les dejan. Y al final su último episodio nos ha vuelto a defraudar a muchos.
Mediaticamente será la numero uno, de eso no hay duda, pero la historia y la audiencia caen en picado. Es una pena porque al principio parecía una serie con posibilidades pero son imperdonables las empanadas mentales que han tenido este año sus guionistas, en especial su director, con tramas como la de Hiro en Japón que no llevaban a nada, la pesadilla de Niki que por muy buena que esté nunca ha aportado nada, los nuevos personajes que a excepción de Elle y Adam han sido puro relleno, y sobretodo esa manera medio improvisada que tienen siempre cuando llega el momento de cerrar la historia. Cada año pasa lo mismo, mucho ruido y pocas nueces, nos prometen lucha, acción, espectaculo y al final se nos queda la cara de ... bueno...pse...
Dice muy poco a su favor que se hable más de una serie con tantas posibilidades por las portadas de revistas, lo buenas que están sus actrices o la expectación que se forma en torno a sus seasons finale para que luego al fin y al cabo cada temporada acabe siendo decepcionante por un motivo u otro.
Heroes me provoca la impotencia de ver al igual que en el fútbol como una joven promesa se pierde entre los excesos y el éxito, acabando finalmente como estrella de un equipo de media tabla. Apuntaba alto pero se perdió.
La seguiremos viendo por inercia, por sus destellos, por hablar de algo, pero nunca será una de las grandes.

Hasta aquí el repaso a lo que ha sucedido por EEUU en estos tres meses, veremos que nos encontramos en la midseason: si se encuentra solución a la huelga o no. Más de uno va camino de Lourdes para evitar una desgracia, pues no olvidemos que en principio allá por enero-febrero llegua el plato fuerte, el arroz caldoso con bogabante: Lost (ahí va un trailer espectacular). Son buenos cocineros, esperemos que no se les pase ni se les queme.

Me sabe mal no hablar de la sexta de Los Soprano o de la misma season finale de Lost, pero como he dicho esto no iba a ser la clásica lista de lo mejor y lo peor del año, sino de septiembre a diciembre, como en el cole, así que nada...

Quedan pendientes para otro día la televisión inglesa (The it crowd) y aunque parezca mentira la española, donde también se hacen cosas buenas.
Pues eso, para otro día....